Descubrimos el Valle de Liendo
lunes 23 mayo 2016Liendo es uno de esos valles inolvidables del Camino de Santiago a su paso por Cantabria. Hoy te invitamos a conocerlo. ¿Vienes?.
Comenzamos en el Valle de Manás, con ganado, verdes prados, riachuelos y nuestros pasos peregrinos. No perdamos detalle pues puede que dejemos a nuestra derecha una estela con más de 2 siglos de antigüedad.
Asomamos a la autovía del Cantábrico y detrás, una bonita panorámica de Liendo, con muchas casonas de estilo montañés, de los que se enamoraron del pueblo y se quedaron o de los que emigraron sin renunciar a volver periódicamente.
Antes de llegar al pueblo sorprendemos a dos peregrinas en la reserva de sus energías, con lo cual agradecen nuestras indicaciones para llegar al albergue y recoger la llave en el bar Villa-Mar.
Continuamos y a pocos pasos la iglesia de María, José y Jesús otra de esas agradables sorpresas que siempre aguardan en el Camino.
El edificio más Sobresaliente, la Iglesia de Nuestra señora de la Asunción, en pleno Camino del Norte. Un retablo cuyo autor era natural de Liendo y un Vía Crucis del Siglo XVI que merece la visita.
Justo detrás de la Iglesia se encuentra un albergue muy bien acondicionado, inaugurado para el Año Santo Lebaniego 2006, que se conserva en muy buen estado.
Pasamos la noche en Liendo y a la mañana siguiente disfrutamos de la arquitectura montañesa que salpica el pueblo.
Ansiosos por conocer uno de los rincones más bellos de Cantabria, la Playa de San Julián, cual es nuestra sorpresa cuando nos topamos con lo que queda de la iglesia románica del mismo nombre.
Estos son los hitos Jacobeos que certifican que, ya en la Edad Media, peregrinos de toda Europa se dirigían a la tumba del Apóstol, no sin antes adorar al Lignum Crucis, en los inmensos Picos de Europa.
Desde el Camino, contemplamos la estampa de la playa de San Julián, sobre la que anida la mayor colonia de buitres leonados que viven en Europa, sobre un acantilado, alcanzando el centenar de parejas.
Seguimos las flechas amarillas a la espera de una Roja, que será la primera de las tantas que salpican el Camino Lebaniego.
Información de Interés: