Lamasón, histórico paso natural hacia Liébana
viernes 24 marzo 2017El municipio de Lamasón, perteneciente a la Comarca de Saja-Nansa, nos conduce directamente al valle de Liébana. Fue poblado desde tiempo inmemorial, posiblemente por ser la vía natural que siempre unió las cuencas del Deva, Nansa y Saja.
Este viejo camino es nuestra ruta hasta Santo Toribio, declarada Patrimonio de la Humanidad en 2015, que nos hará recorrer Venta Fresnedo, Sobrelapeña y Lafuente hasta Collado de Hoz, a 658 metros de altitud, a través de Burío.
La actividad económica principal ha sido siempre la ganadería, que se alimenta de los abundantes pastos de los invernales en las brañas; la explotación maderera de sus bosques, que suministraba a las ferrerías de Herrerías y a la industria naval; y la agricultura, tradicionalmente centrada en el cultivo de alubias, lino y sobre todo maíz para molienda, lo cual hizo que existieran numerosos molinos: llegó a haber 11 en Lafuente, 5 en Quintanilla, 2 en Sobrelapeña y otros 7 en Río, todos actualmente en desuso. Tampoco hay que olvidar la caza y la pesca, que siempre han sido un complemento a la economía del lugar, así como la miel y las nueces.
Los ríos son los que nos marcan la ruta. El Camino Lebaniego continúa por la CA-856, paralela al río Lamasón. Pasamos por Venta Fresnedo, pequeña localidad donde se halla la Cueva de los Marranos, situada a muy pocos metros por encima del cauce del río que posee manifestaciones rupestres de unos 20.000 años de antigüedad.
Seguimos el curso del Lamasón al abrigo de la Sierra de Arria hasta Sobrelapeña, capital del municipio, a unos 240 metros de altitud sobre el nivel del mar. La iglesia de Santa María, situada en un alto dominando el pueblo, presenta restos de obra de la primera mitad del siglo XII, con añadidos posteriores que forman el conjunto de la iglesia y que corresponden a los siglos XVI y XVII.
Dejamos el río Lamasón y tomamos el cauce del arroyo Lafuente, que nos conduce directamente hasta su nacimiento en la localidad de Lafuente, al abrigo del Macizo de Arria. A unos 500 m del camino existe un albergue con todo lo necesario para ofrecer al peregrino una agradable estancia.
Lafuente alberga una de las joyas románicas del Camino Lebaniego: la iglesia de Santa Juliana, bella obra altomedieval del siglo XII. Frente a esta, el puente medieval, lavadero y molinos atestiguan la importancia del agua en todo el municipio.
Justo al lado se encuentra otra interesante muestra artística: la “Pareja de Lamasón”, dos esculturas antiquísimas que se hallan sobre la tapia de una casona, actualmente dedicada a usos agropecuarios, flanqueando la portalada de entrada.
La base que sustenta el busto femenino lleva una inscripción de 1625 que reza: “Cuantos pasan que no vuelven”, quizás por encontrarse junto a la iglesia, de camino al cementerio. La figura masculina parece incluso más antigua que la femenina, pero los orígenes de ambas son inciertos.
Ahora comienza la ascensión que nos llevará a la pequeña localidad de Burío por una pista asfaltada la derecha de la carretera, perfectamente señalizada. A medida que ganamos altura, vamos obteniendo una panorámica espectacular de Lafuente y de todo el valle que dejamos atrás.
Seguimos subiendo hasta llegar a la CA-282, ya prácticamente en el Collado de Hoz, a 658 metros de altitud, que marca el límite con Peñarrubia. Desde aquí disfrutamos de unas magníficas vistas a los bosques, montañas y valles que conforman este bello municipio de Lamasón.